Podemos y el primito

Voy como cada mañana a desayunar al bar de mi amigo Pacorro. Se lo pueden tomar como una chulería por mi parte como otra cualquiera. El caso es que voy. Una vez allí, mientras tomo lo mío, leo el periódico que tan amablemente compra Pacorro para sus parroquianos y para los que no lo son. Me arriesgo a vomitar, porque como saben ustedes abrir un periódico en este delicioso país conocido como España, porque de alguna manera hay que llamarlo, es echar la pota. Y efectivamente, así sucedió. 

Les cuento. Monedero era o es o yo no sé lo que ahora es en Podemos. Antes de que lo pillaran defraudando o mangoneando dinero con sus asuntillos empresariales, era algo en Podemos, no me acuerdo bien, pero algo era en la ejecutiva. Pues bien, Monedero tiene un primo que se dedica a la restauración, es decir, cosas de bares y esas cosas. El tiparraco, conocido como Amós Fernández, cerró por sorpresa el pasado mes de julio el restaurante conocido como El paladar peruano que regentaba en Alicante, y se marchó a vivir a Perú dejando una deuda de más de 30.000€ a sus antiguos trabajadores. 

El Juzgado de lo Social número 3 de Alicante ha emitido una diligencia en la que ordena averiguar su paradero para que pueda ser juzgado por estos hechos. Pero el tiparraco, el conocido como Amós Fernández ya había residido durante varios años en Perú, de donde es originaria su mujer y donde regentaba una empresa de alimentación. El primo materno de Juan Carlos Monedero que desde el pasado verano está huido de la Justicia, que no se olvide este matiz, ha montado un círculo de Podemos en Perú para que los españoles que residen en el país andino puedan sumarse al proyecto político de Pablo Iglesias. Las preguntas son obvias, ¿con qué dinero ha montado eso?¿con el dejó de pagar a sus empleados?¿o su primito del alma lo financia de alguna manera?. 

Cada vez que voy leyendo la noticia en el periódico más ganas de vomitar tengo, no ya por la noticia en cuestión, sino por la familia tan peculiar que hay en Podemos, y más concretamente estos primos hermanos, porque parece ser que de casta le viene al galgo. 

Pero volvamos al restaurante. Para poner en marcha este negocio, contrató como camareros a varios inmigrantes de aquel país y fichó a un reputado chef peruano, Luis de los Ríos, que trabajó gratis durante dos meses para diseñar la carta y cuidar los principales detalles del establecimiento. El cocinero le reclama más de 22.000€, mientras que la deuda que ha dejado al resto de trabajadores suma al menos otros 8.000€, que son los 30.000€ que les indicaba al principio. 

Se trata en su mayoría de inmigrantes peruanos que residen en España, que trabajaban hasta 60 horas semanales por un sueldo de apenas 600€. Desde entonces, la Justicia intenta sin éxito dar con su paradero para comunicarle que el próximo 22 de febrero será juzgado en Alicante. Una pregunta sin importancia, ¿a qué espera el juez para preguntarle a Monedero, su primito del alma?. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo.

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