En esta España cutre y salchichera, llena de golfos, mangantes, chorizos, sinvergüenzas, etcétera y que viven del Estado, no existe un monumento al sinvergüenza desconocido, porque aquí los conocemos a todos. Un infeliz país en donde los ciudadanos honrados y currantes (o en paro), tenemos que soportar a una clase política y sindicalista (no se rían por dios, en España todavía existen esos parásitos sociales aunque ustedes no los vean ni por error) cada vez más rica y lo más importante y bochornoso, que los problemas de los ciudadanos les importan una mierda pinchada en un palo.
Todo esto viene a colación, porque como ustedes saben tengo un defecto, (entre otros) que es LEER. Pues bien, estaba yo los otros días desayunando en el bar de mi amigo Pacorro, cuando se me ocurrió la magistral ideal de coger un periódico de tirada nacional. Entonces me encontré con el notición, que decía así: “Toxo y Méndez amenazan con una huelga general el día 14 Noviembre de 2012 si no hay antes un referéndum para votar sobre los presupuestos generales del estado”. Vaya pareja, pensé yo, por no ponerles lo que se me vino a la cabeza sobre estos dos pajaritos desvergonzados. ¿Esa es su manera de defender al trabajador?¿haciéndole perder un día de trabajo para reivindicar algo que jamás va a suceder se pongan estos dos sindicalistas como se pongan?. Por supuesto, el 14 de Noviembre de 2012 es Miércoles, día (fíjense ustedes qué casualidad) en que los liberados sindicales tienen libre para ir a hacer la compra, huy perdón, para atender los papeleos del sindicato. Por supuesto, estos liberados sindicales junto a sus jefes Toxo y Méndez no pierden el jornal, ya que la empresa se lo tiene que abonar por ser eso, unos vagos, huy perdón, unos liberados y cara duras sindicales.
Pero puestos a hacer referéndums, que por lo menos sean útiles, es decir, que sirvan para algo. Este que proponen este par de cara duras ya se sabe que no va a suceder, porque el PP quieran ellos o no quieran tiene la mayoría absoluta en el congreso y saldrán sí o sí. Por este motivo y bajo mi humilde opinión de ciudadano que nunca se le tiene en cuenta, excepto para pagar impuestos, propongo un par de referéndums que seguro animarían y mucho el cotarro. Por ejemplo, un referéndum podría ser para ver si queremos que los sindicatos vivan de las subvenciones que el gobierno les atiza por tocarse los huevos. Ya se sabe que en los países de nuestro entorno los sindicatos con dos cojones viven de las cuotas de sus afiliados, excepto en España que viven de los impuestos de los ciudadanos, un matiz poco relevante pero que tiene mucha importancia para Toxo y Méndez, ya que si no fuera así, estarían tocando la guitarra con un sombrero en el metro.
El otro referéndum que les propongo es para ver si los ciudadanos estamos de acuerdo en que este par de vividores por naturaleza, cobren los sueldazos (110.000€ al año aproximadamente) que cobran por tocarse los huevos y decir gilipolleces. No entiendo porque estos defensores de los (pocos) trabajadores que quedan tienen que ganar esos sueldazos, a parte seguramente de dietas, pluses, etcétera por no hacer nada y viendo que sus sindicatos no hacen nada para evitar la sangría de destrucción de empleo. Ellos sin embargo sí que cobran sus buenas nóminas a final de mes por ver cómo pasa eso.
Fíjense señores sindicalistas si hay otros motivos para hacer referéndums. Y deberían de hacerse por la sencilla razón de que todavía no han salido a explicar ni Toxo ni Méndez el por qué de esos sueldazos, y el por qué tienen que vivir sus sindicatos de los impuestos de los españoles, cuando ese dineral se podía emplear en educación, sanidad, en carreteras, en fines sociales, etcétera. Yo les pregunto, ¿de verdad que no tienen nada mejor que hacer?¿de verdad se merecen el sueldazo que ganan?. Menuda metida este cuento de los sindicatos. Me recuerda a un chiste que leí por internet y que decía así: El funcionario de hacienda le dice al contribuyente, ¿Personas a su cargo? Sí, - responde el ciudadano y continúa diciendo- un hijo, una familia real, un gobierno central, autonómico y municipal, senadores, diputados, sindicalistas y sindicatos, asesores, cargos de confianza, etc, etc, etc. Es lo que hay Maikel Naig, es la cruda realidad española. Entonces, sindicatos ¿para qué?. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogeros como yo. Un saludo.
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