Siempre los otros

Atentos a esta historia que les voy a contar, no tiene desperdicio porque luego los que derrochan son los otros y los que no tienen las cuentas claras son los otros. Pero atentos. 

Corría el año 2011. Toda Hispania (y en este post en concreto la Comunidad Valenciana) estaba en pleno epicentro de la crisis económica. ¿Toda?, toda no, unos irreductibles gobernantes valencianos resistían siempre al invasor. Pero la vida no era fácil para los ciudadanos que lo estaban pasando muy mal, y encima viendo como les robaban sus políticos de entonces, lo mismo que ahora, pero antes estaba peor visto. 

Resulta, que en pleno epicentro de la crisis, el entonces presidente del gobierno valenciano, Alberto Fabra (PP), impuso a sus consejeros y altos cargos un doble criterio de austeridad: las comidas de trabajo debían ser de menú y no superar un precio de 20€, algo inaudito en un político, pero bueno ante la galería todas esos criterios de austeridad quedaban muy bien. 

Pero a fecha de hoy, descubro con estupefacción y leyéndolo en un periódico de tirada nacional, que los gastos de caja del gobierno valenciano liderado por Ximo Puig (PSOE) y Mónica Oltra (Compromís) revelan una realidad muy distinta: las comidas no bajan de 35/40€ por persona. Toma del frasco, Carrasco. Como siempre pasa en este jodido país de pandereta en el cual me ha tocado vivir, son los otros, es decir, el partido que gobernaba antes, o de diferente color político, los que no tienen claro sus cuentas. Pero ahora resulta que gobiernan otros, los cuales se supone que miran por el ciudadano y en su bienestar. Pero parece ser que el poder nubla las ideas y hace olvidar las promesas de austeridad que llevaban en su programa electoral. 

El poder corrompe, y si además te puedes gastar un dinero que ni siquiera es tuyo en comidas y en homenajes, pues mejor que mejor. Tengo ya muy claro desde hace muchíiiiisimos años, que la asquerosa casta política que tenemos en este país conocido como España, porque de alguna manera hay que llamarlo, sólo sirve para dos cosas, la primera para jodernos la vida a base de impuestos y de otras gilipolleces y la segunda para ellos hacerse ricos y disfrutar de la buena vida a costa de joder la vida de los ciudadanos a quien dicen gobernar. Y para hacer estas dos cosas da igual el color político al que se pertenezca, ya que las prioridades son las prioridades. 

Por eso ya no me extraña nada de lo que vea o lea de nuestra asquerosa casta política. Lo único que sé, es que votar es tirar mi voto a la basura, porque para el caso es lo mismo. Por eso, cuando toquen votaciones, va a votar su put_ madre, ya que para molestarme en ir, para que luego salga un vencedor, gobiernen otros distintos a la mayoría votada porque la suma de escaños así lo permite, y sentirme traicionado por un Estado supuestamente de derecho y pillar un cabreo del copón por perder mi tiempo en votar, pues no voy y que hagan lo que les salga de la entrepierna, ya que lo van hacer igual y me van a seguir jodiendo igual, aunque luego la culpa la tengan los otros. Es la triste historia de España. Pa pillar un camino. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogeros como yo. Un saludo. 

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