En esta España llena de corruptos, de malversadores, de ladrones vestidos con corbata fosforito o sin ella, no hay monumento al sinvergüenza desconocido porque aquí los conocemos a todos. Un infeliz país donde la gente puede verse obligada a cerrar tienda o negocio por equivocarse en su gestión, pero donde ningún político, que llevan años robándonos, colocando a familiares, dando ayudas públicas a novios, mujeres y colegas empresarios por tener negocios con las administraciones del estado, que es literalmente la gestión irresponsable de un dinero que ni siquiera es suyo, pagan el precio de sus errores. Nunca. Y ahí están peleándose como gallos de corral, tirándose al lodo de ese circo de la Carrera de San Jerónimo para ver quién es el que se lleva el premio al tú más. Un espectáculo lamentable, bochornoso y asqueroso, por parte de una chusma política que no saber hacer otra que ensuciar todo lo que toca sin miramientos y sin vergüenza ninguna.
Muchas veces pienso que si estuviéramos en la época de Alcapone o de Pablo Escobar, esto sería una guerra sin cuartel entre mafias. Tienen pinta de eso, de mafiosos, ya que no dejan títere con cabeza. Informaciones que se filtran desde fiscalías para moverle el sillón a una porque su novio está involucrado en una investigación tributaria, informaciones sobre un rescate a una empresa privada en la que aparece la mujer de un famoso presidente del gobierno, un mafioso que es ministro de un importante ministerio diciendo sandeces sobre que si una presidenta de una comunidad autónoma se acuesta con el novio que está siendo investigado, un tipo que fue asesor moviendo mierda para no perjudicar a nadie aunque haya mucha gente perjudicada por la investigación policial, los cuales algunos también estaban dentro de la trama de este mafioso asesor…..sólo falta los ajustes de cuentas y los avisos a navegantes que este tipo de redes mafiosas y mafiosos hacían para avisar al oponente.
Los ajustes de cuentas ahora no se hacen con pistolas (menos mal), se hacen a través de los medios de comunicación afines, aunque muchos de esos medios sean panfletos en manos de los gobernantes, los cuales harán todo lo posible para que cuenten su verdad y así les sea más favorable. Los sicarios actuales son esos, los periodistas y sus medios de comunicación afines a estas mafias camufladas de partidos políticos y de chorizos en toda regla, los cuales no saben dimitir ni los que están por encima saben quitar por las reglas que sean. Ya saben ustedes que en este país corrupto en donde leer un periódico, ver cualquier telediarios y oír cualquier emisora de radio que de noticias, provoca literalmente echar la pota.
Y como dijo el gran filosofo, siempre hay cuatro lados en una historia: tu lado, su lado, la verdad y lo que realmente sucedió. Y ahí siguen estos mafiosos y sus sicarios periodísticos, intentando discernir el último punto, lo que realmente sucedió, porque los otros tres ya lo vemos por desgracia todos los días con el espectáculo tan bochornoso que dan, que hacen que sienta vergüenza ajena cada vez que salgo de viaje al extranjero. España, año 2024. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo.
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