Si alguna vez en España hubiera un juicio de Núremberg sobre el periodismo de investigación, en este país faltarían sogas. En este país tan dado a los bulos, tan dado a tirar la máxima mierda posible al que hay enfrente, el periodismo debería ser lo único en lo que los ciudadanos deberíamos de confiar para entender y saber lo que está pasando en este país. Pero no, en este país los medios de comunicación (no todos por supuesto, siempre hay excepciones, los menos pero los hay) son los auténticos voceros de los fontaneros de cualquier partido político y de sus secuaces, y lo vemos día sí día también.
En estos últimos días estamos viendo como la vida política de este país de pandereta conocido como España porque de alguna manera hay que llamarlo, está inmersa en un bucle de corrupción que es intolerable. Casos que están en los tribunales y se filtran convenientemente para que los medios ataquen al contrincante político para así hundirlo en lo más profundo del fango, es un ejemplo bastante clásico. Los medios de comunicación lo hacen tanto a los que no están gobernando como a los que nos quieren gobernar. Encontrar un punto flaco, un punto débil que atacar para tumbar al contrincante político se ha convertido en el auténtico periodismo. Los medios de comunicación tienen también su ideología política, y cada día que pasa se acentúa más. El fin ya no es informar, sino hacer creer a la opinión pública que la información que da cada medio es la más veraz. No lo pongo en duda, porque para eso están, pero se ha perdido toda compostura y toda capacidad de informar sobre lo que ocurre con rigor.
Medios de izquierdas tratando de sacar trapos sucios de políticos de derechas omitiendo la actualidad. Medios de derechas tratando de sacar trapos sucios sobre políticos de izquierdas omitiendo la actualidad o parte de ella. Esto es lo que tenemos, una batalla entre medios progresistas y conservadores que lo único que hace es que los ciudadanos que queremos estar informados, cada vez que abrimos un periódico, sólo echemos la pota ante tanta miseria política y degenerado periodismo vendido al mejor postor.
Es una pena que tengamos esto, pero es lo que hay Maikel Naig. El estar informado se convierte en una actividad de riesgo ante noticias que muchas de ellas se pueden considerar bulos, y que desde los ministerios oportunos o desde los despachos de la oposición airean según su conveniencia. Los auténticos fontaneros son o están empezando a ser los periodistas. Noticias que se filtran, conversaciones vendidas al mejor postor, filtraciones de investigaciones judiciales oportunamente filtradas sobre el enemigo político, debates en las teles públicas o privadas en las cuales se niegan evidencias, audios y vídeos dependiendo quién sea el enemigo político a batir, periodistas hundidos o desprestigiados por hacer medianamente bien su trabajo…..
Esta es la España de la información según mi criterio personal e intransferible. Puede gustar o no, pero es el mío, es lo que percibo, es lo que veo, leo y oigo. Un despropósito para cualquier ciudadano que medianamente quiera estar informado tanto de un lado como de otro o de ambos del espectro político. Pero quía, eso es una quimera. España, año 2025. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo.
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