Muchas veces pienso que en este país hay dos clases de personas: los que son unos vividores y los que tienen un poco de suerte. En este segundo grupo estamos todos los españoles de a pie, es decir, los que con suerte tenemos un trabajo, los que con suerte nos pagan medio en condiciones para poder hacer un carro de la compra, los que con suerte no nos ponemos enfermos para poder seguir ganando un duro, los que con suerte podemos disfrutar de unas pequeñas vacaciones, en definitiva, los que con suerte podemos hacer una vida medio decente, pero con dificultades para hacerla. No me quejo, porque sé que hay gente que está peor e incluso muchísimo peor que yo.
Luego están los del primer grupo, que abarca desde los que viven dentro de la corona, los que viven de la política creando las circunstancias adecuadas para los que con suerte podemos mantenernos, los eclesiásticos y los sindicalistas (no se rían por dios, en España todavía existen estos parásitos sociales aunque ustedes no los vean ni por error televisivo), que se pueden considerar un subgrupo aparte dentro del grupo de los vividores, aunque pensándolo bien, todos los pertenecientes a este grupo lo sean. Pero cabe recordar, que este post de este blog pecador, tiene la capacidad de aforo limitada, con los cual me voy a centrar en los sindicalistas, y más concretamente en un espécimen que debería ser digno de estudio en cualquier universidad de psicología.
Se trata de Pepe Álvarez, líder de la UGT, y que como se sabe, es el único español que podría arrebatarle a le Reina Isabel II de Inglaterra el record mundial de permanencia en un cargo. ¡¡Vamos Pepe, sabemos que es duro tu puesto, pero aguanta!!.
Resulta que este tipo, es liberado sindical desde 1978 (ojo al dato, que no es nada baladí), es decir, desde que tenía 22 años. Resulta, que no ha trabajado en NINGUNA empresa en más de cuatro décadas, con lo cual surgen varias preguntas muy interesantes al respecto. ¿Le quedará pensión?¿cómo se calcula la pensión de este hombre?¿o es que desde ese puesto de líder sindical ya le queda o le quedará una paguita por el simple hecho de serlo?¿cómo es posible tener la cara más dura que el diamante y seguir apareciendo en los medios dando consejos a otros?¿cómo es posible esta perpetuidad en el cargo como el mejor dictador que se precie?.
Esto es lo que tenemos, que no lo que nos merecemos, en esta España salchichera y clientelar. Gente de este estilo que sólo buscan su propio bien, su propio bienestar y que nada o casi nada hace por los trabajadores que dicen defender. Un líder que le ríe las gracias a la ministra de turno para poder seguir perpetuándose en el poder con el descaro que le caracteriza y así poder seguir ganando sus 110.000€ al año, mientras miles de trabajadores con lo que ganan no son capaces de llegar a final de mes. Pero esta es la España que nos hemos dado, y sólo queda esperar que el meteorito llege cuanto antes. Entonces, ¿sindicatos para qué?. España, año 2024. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo.
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