Ley de vivienda

Un país en el que se puede ocupar una vivienda que tú no has comprado, ni te la has ganado…ese es un país abocado al desastre. Y encima sacan una ley, en la que la policía no te podrá defender de delincuentes y criminales, ya que, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado no podrán intervenir por sorpresa, tendrán que comunicar el día y la hora. Además, si el propietario es un gran tenedor (que posee más de cinco viviendas), se le cancelarán todos los procesos si no certifican que han intentado conciliar con los infractores que sean considerados vulnerables. Y, además, para colmo, el propietario del inmueble tiene que hacer todas las acreditaciones relacionadas con la vivienda. Se desestimarán las demandas, que pretendan la recuperación de la posesión de una finca, en que no se especifique si el inmueble objeto de las mismas constituye vivienda habitual de la persona ocupante. 

Todo lo anterior, está escrito en la nueva ley de vivienda que este grupo de moñas que nos gobiernan, junto con sus variopintos socios, van a provocar que este país ya de por sí abocado al desastre, llegue antes a ese hoyo al que va a caer. 

Pero no se vayan todavía, aún hay más, ya que esta ley de vivienda, distingue entre usurpación y allanamiento, y es que en el caso de la usurpación se protege la propiedad privada, mientras que, en el allanamiento, el bien jurídico protegido es la inviolabilidad del domicilio. 

Pero también ambas cosas tienen su definición, a saber: la usurpación de una vivienda es la ocupación ilegal de una vivienda deshabitada sin el consentimiento de sus propietarios. Un tercero sin autorización toma el inmueble y lo convierte en su residencia. Es uno de los delitos tipificados en el Código Penal y tiene su respectiva pena. La sanción consiste en una multa económica, porque el bien inmueble no es considerado morada para la justicia. 

El allanamiento de morada es el ingreso o permanencia en una vivienda sin la autorización del morador. Una persona que, aun siendo el inmueble habitado por su dueño, la intenta convertir en su propia vivienda sin permiso. 

Según el alcahuete mayor del reino, el tal Patxi López, la culpa es de los ciudadanos de este país, que somos los que mezclamos las cosas, ya que mezclamos los desahucios con la okupación. Pero muchas veces coinciden, porque si alguien no puede pagar la hipoteca, el banco se la quita, pero sigues pagando, y si algunos okupas se introducen en esa vivienda, pues ya la tienes desahuciada y okupada. Pero según este alcahuete, lo que se pretende hacer con esta nueva ley de vivienda hecha a medida para golfos, es buscar el arbitraje y la intermediación en los desahucios para que en caso de vulnerabilidad de quien no puede pagar ese alquiler pueda ser puesto en relación con los servicios sociales (ojo al detalle) para buscar una solución habitacional. 

En definitiva, tanto si te usurpan o si te allanan tú vivienda, el que pierde es el propietario como suele ser habitual en esta España, y punto y pelota. Y encima, la policía, atada de pies y manos. España, año 2023. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo. 

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