¿Está incitando?

“Los niños, las niñas y les niñes de este país tienen derecho a conocer su propio cuerpo, a saber, que ningún adulto puede tocar su cuerpo si ellos no quieren, y que eso es una forma de violencia. Tienen derecho a conocer que pueden amar o tener relaciones sexuales con quien les dé la gana, basadas, eso sí, en el consentimiento". Palabras de Irene Montero ministra de Igual-Da de este desdichado gobierno que tenemos la mala suerte de tener y de mantener. Estas palabras, las dijo esta tipa el jueves de la semana pasada durante la Comisión de Igualdad del Congreso. 

Pero ante tan asquerosas palabras, porque no se pueden definir de otra manera (por no decir que llegan casi a incentivar el abuso de menores), porque igual me enchironan, cabe destacar que en este país en el cual todo lo que se dice vale, mientras quien lo diga sean los representantes del gobierno, sus socios y los subvencionados y chupaculos gubernamentales, cabe recordar lo siguiente: “Los niños y niñas menores de 16 años en España (o sea, en el mismo país en el cual vive esta moñas de ministra, y en el cual para ser policía, por poner un ejemplo clásico, tienes que saberte legislación y Constitución, mientras que esta ex cajera de supermercado ha llegado hasta ahí sin nada más que con la ayuda de su ex pareja como es bien sabido) no pueden dar su consentimiento para mantener relaciones sexuales, según el Código Penal vigente en España”. La ministra de Igualdad, Irene Montero, incitando casi a delinquir, después de que dijera (se lo vuelvo a recordar, para que quede constancia) “que los niños tienen derecho a conocer que pueden tener relaciones sexuales con quien quieran”. A fecha, hora y día de hoy, esta impresentable sigue libre como un pajarito, y nadie en el gobierno ni desde ninguna asociación feminista financiada por su ministerio, ha dicho nada. 

Hay cosas que no se pueden permitir. Hay cosas, que no se pueden amparar por ese tópico de la libertad de expresión, porque sencillamente, esas cosas son inaceptables, lo mismo que son otras, como que todavía a día de hoy, haya moñas que estén en contra del aborto. Es algo impensable en una sociedad y en una democracia de un país que se considera medio serio. Pero recuerden que éste no es un país normal, sino España, un lugar donde todo disparate, por gordo que sea, tiene su asiento, y eso es un matiz nada baladí y muy a tener en cuenta para entender ciertas cosas, y sobre todo, para entender la permisividad y el levantamiento de mano que hay con ciertas personas, como es el caso que nos ocupa. Pero lo que es más terrible, es que gente que no tiene la menor cultura, ni la menor memoria, gente que carece de los más elementales conocimientos legislativos (para llevar un ministerio), fundamentales para la política, se atreva a entrar como elefantes por cacharrería en cuestiones tan delicadas para las que hace falta mucho conocimiento y mucha lucidez. Por eso, cuando uno ve a un animal de bellota, con corbata fosforito o con lo que lleve, hablando de ciertas cosas, y diciendo las gilipolleces que dice, uno piensa en manos de quién estamos. En fin, es lo que tenemos. Mala suerte lo llaman algunos. España, año 2022. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo. 

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