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domingo, 29 de diciembre de 2019

Oriol el privilegiado

Muchas veces veo, oigo y leo cosas que no llego a creer y menos a entender. Y me enfado. Pero luego me doy cuenta de que vivo en España, y todo se me pasa, o por lo menos eso creo, porque lo único que ocurre, es que tengo que tragar con todo lo que nuestros animales de bellota, normalmente conocidos como políticos, legislan, NO para los ciudadanos, sino para ELLOS, aunque se llenen la boca de que las leyes hay que cumplirlas, y que son iguales para todos. 
Y no me creo que sea así. No me pueden hacer tragar con ruedas de molino, y máxime cuando en esta era de la información, pasa algo en Japón y al minuto lo sabe casi todo el mundo. Igual que no me creo que la justicia sea igual para todos, ni a la hora de aplicarla, ni a la hora de mantenerla. 
Muchas veces pienso que la justicia es como todo, un negocio. Tanto tienes, o tanto poder tienes o has tenido, tanto vales y por lo tanto muchos privilegios tienes. Por ejemplo, Iñaki Urdangarín, ladrón condenado, el cual se le dio a elegir una cárcel para cumplir su condena, cosa que a pocos presos se le permite; al poco tiempo salió para hacer labores sociales a un centro especializado, cosa que sólo a algunos presos se les concede para reintegrarse en la sociedad; pasará las navidades en casa por buen comportamiento y por los buenos informes que tiene de Instituciones Penitenciarias, cosa que más de un preso, y sólo por robar para dar de comer a sus churumbeles, no lo tendrán ni de coña. 
Otro ejemplo clásico, para que ustedes vean lo de la justicia en este esperpento de país. Oriol Junqueras, el líder de ERC condenado a 13 años por sedición. Resulta que tiene un despacho propio para realizar sus tareas, con wifi (con lo que puede tener contacto con el exterior) y un ordenador, privilegios que muchos presos nunca tendrán a pesar de que a lo mejor son más listos que este independentista; Oriol, recibe a la semana entre 50 y 60 visitas entre amistades, familiares, gente de ERC, etc, etc, cosa que un preso normal JAMÁS recibiría ni por error administrativo; Oriol no lleva a un funcionario detrás de él todo el tiempo, como era de esperar, cosa que los demás presos si los tienen a todas horas; Oriol, se puede acoger si quisiera al Art. 100.2 de Instituciones Penitenciaras, el cual permite salir de la cárcel para cuidar o asistir a familiares, cosa que otros presos, aunque la gravedad de sus familiares sea agónica, están en lista de espera. 
¿Cómo llaman ustedes a todo lo anterior?, yo personalmente lo llamo privilegios, pero los juristas y algunos politicuchos de pacotilla, lo llaman derechos. Es lo que hay Maikel Naig, unos intentando vivir y sobrevivir, y si los cazan van a la cárcel cumpliendo la sentencia íntegra, y muchas veces desproporcionada, y otros por ser quienes son, por robar y sin devolver ni un euro de lo robado, atacando a España con movimientos sedicionistas, y la justicia los apoya. Muchas veces me pregunto qué hago viviendo aquí y trabajando como un mulo para mantener este sistema que ellos se han dado. España, año 2019. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogueros como yo. Un saludo. 

 

NOS VEMOS EL AÑO QUE VIENE QUERIDOS BLOGUEROS. 

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