Voy como cada mañana a desayunar al bar de mi amigo Pacorro. Se lo pueden tomar como una chulería por mi parte como otra cualquiera, el caso es que voy allí y ya de paso cojo algún periódico y me informo o cojo la flipaera oportuna, que es lo que normalmente suele pasar.
Pues bien, en uno de esos periódicos, me encontré de sopetón con una noticia que me dejo patidefuá pese al escaso margen de sorpresa que a uno le deja ser súbdito español. La noticia decía así: “PODEMOS RECLUTA CHIVATOS ENTRE SUS BASES PARA DENUNCIAR A RIVALES POLÍTICOS COMO PARTE DE LA TRAMA”. Toma del frasco, Carrasco.
Esto populistas a lo suyo, haber cual es la payasada del día y ya de paso haber si es posible que supere la del día anterior. Me parece a mí, que estos pájaros están en la política no para solucionar los problemas de nadie, sino para hacernos ver que payasos hay en todos lados. Primero el tramabus y ahora chivatos. ¿Qué será lo próximo, cámaras ocultas en las casas de los afiliados?, válgame la virgen que panda de fenómenos. Éste método del chivatazo recuerda mucho al utilizado en la dictadura cubana, mediante el cual los ciudadanos se pueden chivar de sus vecinos obteniendo así beneficio de ello.
Es el acabose, es lo que me faltaba por ver es lo que nos espera y es lo que pasa cuando un partido político se queda sin ideas y sin argumentos para defender lo indefendible, como es el caso de este partido político que defiende causas perdidas y a malvados dictadores como es el caso de Nicolás Maduro, pero claro, cada uno defiende la mano que le da de comer.
Sigo pensando que esta panda que forma el partido morado, son izquierdistas de gamba roja, gente que está en la política para gastarse en menús 150€ y para aprovecharse de un sistema que mientras les vaya bien a ellos es el mejor del mundo, pero cuando ya no cuadra con sus intereses es lo peor que te puede echar a la cara. Gente pija, como es el caso del concejal de Madrid el conocido Espinar, porque de alguna manera hay que llamarlo, el cual critica la corrupción, pero no critica a su padre por haber mangoneado pasta de los clientes de Caja Madrid con las tarjetas Black, o también este mismo personaje, cuando vendió su piso de protección oficial a un precio escandaloso.
Para eso quieren el sistema, para su beneficio propio. No me extrañaría nada que utilizasen a esos espías para otro fin. Pero ellos sabrán. Lo que está claro es la falta de ideas, la falta de propuestas, la falta de ayudar al país y lo bien que viven. Esto es lo que está claro, lo demás son ocurrencias para pasar el tiempo, porque de alguna forma hay que pasarlo. Vaya tela. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogeros como yo. Un saludo.
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