Los curas se revelan

El inquisidor Pérez Camino, debe de estar muy ocupado excomulgando a los diputados que han votado a favor de la Ley del Aborto, tan ocupado, que no tiene tiempo de quitar la mierda en su propia casa. Y esa casa precisamente está en el norte de España, y más concretamente en el País Vasco, y ya para afinar más, en la provincia de Guipúzcoa, y ya para que vean hasta donde llego, (tómenselo como una chulería por mi parte, como otra cualquiera), es en la diócesis de San Sebastián, donde estos párrocos no quieren al nuevo obispo, y por eso han firmado un manifiesto donde dicen que “este nuevo obispo les causa dolor, por no estar en la línea de su diócesis”, es decir, que para ellos, este nuevo obispo llamado José Ignacio Munilla, no es nacionalista vasco ni simpatizante de ETA y todo su entorno y por eso sufren su nombramiento, no en silencio como las almorranas, sino que lo hacen público para saber de qué lado ideológico están. Se fueron los monseñores Setién y Uriarte, y se acabó el nacionalismo vasco en la Iglesia, ya que antes sólo daban las misas para los de la izquierda abertzale y ahora tienen que darla para todos.
Estos nombramientos al parecer los hace el Papa, y éste debería de saber que esta zona de España es conflictiva, y que se tiene que andar con mucho ojo con lo que hace y a quién nombra. Por eso fue el jefe de la Congregación para la Doctrina de la Fe, es decir, la Santa Inquisición, y por ese motivo el Papa debe de saber el montón de infieles, asesinos, encubridores, y demás mierda variopinta que pulula por esa zona de España bajo la bandera del nacionalismo y de la izquierda radical abertzale, para haberse evitado ese problemilla que le ha surgido. A parte de eso, el Papa cuenta con los mejores servicios secretos del mundo, ya que iglesias hay en casi todo el mundo, y su red de espías es de lo mejor y al pie del cañón, entonces, ¿por qué ha nombrado a monseñor Munilla sabiendo que no es muy de izquierdas? Pues habrá que preguntarlo, pero mientras, la rebelión se ha instalado en el seno de la diócesis guipuzcoana.
Aquí mientras, Pérez Camino, no ha abierto todavía esa boquita que le ha dado dios para soltar alguna declaración de esas que nos tiene acostumbrados, y bien es sabido que “quién calla otorga”, o dicho en castellano castizo, se tiene que tragar el nombramiento quiera o no quiera. Es lo que hay, maikel naig (perdonen mi inglés cutre y salchichero). Pero la verdad, es que estoy ansioso por saber lo que piensa de esta rebelión y cómo va a actuar, ¿excomulgara a todo al 70% de los curas que están en contra de este monseñor Munilla?¿cortará por lo sano esta especie de cáncer que le está empezando a salir en la provincia de Guipúzcoa?¿qué piensa el nuncio papal de este lamentable alzamiento eclesiástico?¿y el Papa?¿por qué no sale Pérez Camino con su peculiar gracia a dar explicaciones?¿por qué los siervos del Señor, que en teoría están para hacer felices a los pocos fieles que quedan, se meten en política y encima demuestran su ideología política?¿para esto está la iglesia?¿donde están ahora todos los medios de comunicación, todos los contertulios afines a la derecha, para dar caña a estos rebeldes curas nacionalistas? ¿no será que aquí pasa lo de siempre: “HACER LO QUE YO DIGA, PERO NO HAGÁIS LO QUE YO HAGA”?¿será eso?. Como siempre la iglesia con sus actitudes y comentarios, haciendo amigos, pero mientras perdiendo fieles con las manos llenas. Y para colmo, metidos en política, ¿no saben qué política y religión es una combinación chunga?¿es qué no lo ven en los países islámicos radicales?. Miedo me da la situación. “Laus deo”. Pues eso, que me lo expliquen. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogeros como yo. Un saludo.