Ya sé qué ustedes saben que los sindicatos (no se rían por dios, en España todavía existen estos parásitos sociales aunque ustedes no los vean ni por error televisivo) no sirven para nada, que sólo están para cobrar las subvenciones, vivir del cuento, alejarse de los problemas de los trabajadores a quién dicen defender, apoyar a los pensionistas para sacarse la foto con ellos en vez de haber estado luchando con ellos mientras éstos estaban trabajando y apoyar manifestaciones independentistas en Barcelona, mientras por el cinturón rojo de Barcelona no han ido ni a poner una pegatina en una farola. Pero todo esto que les he contado no es nuevo para ustedes, porque es la cruda realidad de estos sindicalistas vendidos al mejor postor para seguir chupando de la teta de las subvenciones.
Pero me voy a centrar en la manifestación independentista acaecida en Barcelona el día 15 de Abril del año de nuestro señor 2018. Ha día de hoy, estos sindicalistas no han dado una explicación, aunque sea simplona, del por qué estaban al lado de la alta burguesía catalana en vez de estar defendiendo los derechos de los trabajadores que están a sueldo de esa gente que se manifestó el día 15 y que ellos sin ningún tipo de vergüenza ni pudor apoyaron.
Pero lo que realmente hicieron UGT y CCOO fue sumarse a las golpistas de Òmnium y ANC para apoyar a los golpistas encarcelados, según detallo en la presentación de esta manifestación la plataforma Espai Democràcia i Convivència.
Para ser más exactos, a esta manifestación fue la flor y nata de la representación sindical catalana, los mismos que no van por el cinturón rojo de Barcelona. Les hablo de los secretarios generales de CC.OO y UGT, Javier Pacheco y Camil Ros, respectivamente. Como no podía ser de otra manera, también acudió el vicepresidente de Òmnium Cultural, Marcel Mauri, y el vicepresidente de la ANC, Josep Cruanyes, los cuales han defendido que esta movilización quiere sumar a toda la sociedad catalana que piensan como ellos, ya que la sociedad catalana que no lo hace, son unos apestados, antidemocráticos y españoles de pura cepa.
La manifestación fue en el Passeig de Gràcia de Barcelona y coincide con los seis meses de cárcel del expresidente de la ANC, Jordi Sánchez, y del presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart. Casualidades de la vida.
Es ya lo que nos quedaba por ver de estos sindicatos, apoyando causas ilegales y apoyando a personas que han cometido ilegalidades por no cumplir la ley. Esto es el futuro sindical, por lo menos de los dos grandes sindicatos españoles, como son UGT y CCOO. Por lo menos tenemos la esperanza de que algunos sindicatos minoritarios están dando la cara de verdad por los trabajadores de verdad, pero sólo por ahora. Ya veremos en cuanto cojan poder y se empiecen a codear con la chusma política y empresarial de este país de pandereta. Vaya tela. Entonces, ¿sindicatos para qué?. Bueno, así que os espero, para que me comentéis en profundidad, lo que pensáis o queráis a blogeros como yo. Un saludo.
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